Así a lo tonto, hemos ventilado ya el mes de enero.
He empezado el año igual que terminé 2011, entrenando, para aprovechar la inercia que cogí en noviembre.
En navidades, objetivos cumplidos, dos sesiones de entrenamiento diarias (carrera y piscina), un poco más flojas, eso sí.
Para rematar las fiestas, Cross en Tordesillas, un clásico, mucha niebla, mucho frío y muchas buenas sensaciones, el trabajo bien hecho tiene sus frutos.
En piscina, muy buenos tiempos, después de unos años he superado la barrera de los 30 segundos en 50 libre, ¡por fin!, 29,16 en el Trofeo San Vicente.
Por ahora poco más, seguir preparando el Maratón de Barcelona (25 de marzo) y continuar la progresión en piscina.
Y entre medias, sufrir como un cabrón, para no variar...jajaja
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