Después de unos días de descanso en Asturias, comenzamos el plan de entrenamientos de verano, cuyo objetivo será preparar la MARATON DE ZARAGOZA DEL MES DE NOVIEMBRE.
Aún queda tiempo, pero este tipo de eventos hay que planificarlos con bastante tiempo.
La piscina cubierta ya ha cerrado, no tengo muchas ganas de entrenar en la descubierta, con tanto jaleo, eso no quita para que vaya una o dos veces a la semana para descargar.
La idea durante estos meses será la de acumular kilómetros en las piernas y en el corazón, para afrontar con suficiencia los 42 km.
Unos 40-50km semanales, con un día de descanso, alternando la carrera continua con el trabajo de las series en llano y las series en cuesta, un "batido" de posibilidades que veremos a ver cómo sabe.
Antes de la prueba Zaragozana, está la media de Huesca y la media de Barbastro, que servirán de evaluación previa.
Se hace duro el correr con este calor, no obstante, el hecho de saber que es un doble entrenamiento (mental y físico) hace que las ganas de ponerse las zapatillas no disminuyan.
¡Vamos!
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