Llegado a este punto del calendario, tendría que hacer un balance de lo guay que ha sido el año, de las carreras a las que he ido y demás tópicos que os importan una mierda, tanto o más que a mi.
Los que me conoceís ya sabéis que hablo mal pero con cariño. :-)
Lo que os voy a contar creo que es más importante, ya que si no lo paramos se va a convertir en un virus bastante peligroso, de hecho ya se ha instalado en según que cabezas y egos.
Estamos asistiendo en las últimas jornadas a una avalancha de GILIPOLLECES relacionadas con el correr, que asustan.
Algo tan simple, bonito e importante como el dar un paso y después otro a cierta velocidad, está siendo atacado y vejado por una panda de egos y "corredores de facebook" que hacen que sienta vergüenza cuando los veo pulular por las redes.
"Más Aniago y menos Facebook", como bien decía mi amigo Nacho.
Me hace gracia además, porque se quejan y lloran por todo, cuando no están dando un palo al agua desde hace años.
Conozco faseros que les dan mil vueltas, con males mayores y no se quejan abiertamente, buscando el consuelo del algún corista de circunstancia.
Cuánto mas conozco a ciertos personajes más quiero al Pinar de Antequera.
Huid de mensajes navideños, aplicaciones inútiles y mierdas sinónimas.
DEDICAOS A CORRER.
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